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Data Mesh vs Data Fabric: Eligiendo el Paradigma Correcto para Escalar tu Empresa

Escrito por Hayde Martinez | 19-jun-2025 15:15:00

Tienes plataformas nativas en la nube, pipelines que cruzan continentes y dashboards que rastrean todo, desde tasas de cancelación hasta datos de sensores. Pero aquí está el problema: a pesar de toda esta infraestructura moderna, muchas organizaciones aún tienen dificultades para escalar el acceso a los datos de forma significativa. Ya no se trata solo del volumen, sino de la velocidad, la variedad y la capacidad de convertir datos en decisiones de forma ágil.

En este contexto han surgido dos paradigmas arquitectónicos como opciones clave para modernizar la gestión de datos a gran escala: Data Mesh y Data Fabric. Aunque a menudo se mencionan juntos, estos conceptos son fundamentalmente distintos en su enfoque, su arquitectura y los cambios culturales que requieren. Comprender estas diferencias es esencial para cualquier empresa que busque dejar atrás los cuellos de botella centralizados y avanzar hacia un futuro más ágil y basado en datos.

 

¿Qué es un Data Mesh?

Un Data Mesh es un enfoque sociotécnico descentralizado para la arquitectura de datos—uno que alinea la estructura organizacional con los sistemas técnicos. Este modelo, acuñado por Zhamak Dehghani, se basa en cuatro principios clave:

  1. Propiedad orientada al dominio: Los datos se tratan como un producto y son gestionados por equipos multidisciplinarios dentro de cada dominio.
  2. Datos como producto: Cada equipo es responsable de la calidad, accesibilidad y usabilidad de los datos que genera.
  3. Infraestructura de autoservicio: Una plataforma compartida provee herramientas y estándares para empoderar a los equipos.
  4. Gobernanza federada: Se gobierna mediante estándares y políticas, no a través de un control centralizado.

Este enfoque es ideal para organizaciones grandes y complejas con múltiples unidades de negocio. En lugar de depender de un equipo centralizado para ingerir, transformar y entregar todos los datos, cada dominio gestiona y entrega sus propios productos de datos. La meta es escalar el acceso a los datos a través de la escalabilidad del ownership.

Pero implementar un Data Mesh no es simplemente un cambio tecnológico. Implica un cambio de mentalidad organizacional. Requiere alta alfabetización en datos, prácticas maduras dentro de los dominios y alineación entre equipos en temas de gobernanza e interoperabilidad.

 
¿Qué es un Data Fabric?

En cambio, un Data Fabric es un patrón arquitectónico que busca crear una capa unificada para integrar, gestionar y gobernar datos distribuidos en distintas fuentes y entornos. Es como un tejido conector que une datos en la nube, en instalaciones locales y en entornos híbridos.

Las capacidades clave de un Data Fabric incluyen:

  • Descubrimiento y catalogación impulsados por metadatos
  • Integración automática de datos y orquestación de pipelines
  • Acceso a datos en tiempo real y por lotes
  • Metadatos activos y grafos de conocimiento
  • Gobernanza y seguridad integradas

Un Data Fabric se basa fuertemente en la automatización y la inteligencia artificial para permitir una integración y gobernanza continua. No cambia necesariamente quién es dueño de los datos, pero proporciona una base compartida para acceder y gestionarlos de forma coherente, sin importar su ubicación o formato.

 

Comparando los Dos Paradigmas    

Aunque ambos buscan romper silos y mejorar el acceso a los datos, sus estrategias son diferentes:

Característica Data Mesh Data Fabric
Enfoque central Descentralización organizacional Integración tecnológica
Modelo de propiedad Equipos por dominio gestionan los datos como producto Propiedad centralizada o híbrida
Cambio cultural Alto (responsabilidad distribuida) Moderado (cambio técnico)
Requerimiento tecnológico Herramientas ligeras y flexibles por dominio Alta inversión en virtualización, metadatos y automatización
Modelo de gobernanza Federado, basado en estándares Centralizado con automatización
Fortaleza en escalabilidad Escala a través de personas y procesos Escala mediante tecnología y abstracción



¿Cuál Debes Elegir?

No existe una única respuesta correcta. La elección depende de la madurez, objetivos y limitaciones actuales de tu organización.

Elige Data Mesh si:

  • Tu organización es grande y orientada por dominios.
  • Tu equipo central de datos es un cuello de botella. 
  • Estás fortaleciendo la alfabetización de datos en unidades de negocio.
  • Quieres alinear la arquitectura de datos con mentalidad de producto y metodologías ágiles.

Elige Data Fabric si:

  • Tu entorno es híbrido o multi-nube y altamente complejo.
  • Necesitas unificar el acceso a los datos sin cambiar su propiedad.
  • Quieres usar automatización para gestionar metadatos, linaje y orquestación.
  • Tu necesidad principal es integrar y observar datos sin una transformación cultural profunda.

En muchos casos, un enfoque híbrido puede ser lo más práctico. Puedes implementar un Data Fabric para unificar el acceso y la gobernanza, mientras desarrollas un modelo de Data Mesh en dominios clave para impulsar la autonomía y la agilidad desde la fuente.

 

No Hay Soluciones Mágicas

Tanto Data Mesh como Data Fabric han ganado protagonismo entre analistas y proveedores. Pero adoptar uno u otro no es una solución mágica. La escalabilidad real se logra cuando hay una alineación clara entre estrategia, cultura y arquitectura.

En la práctica, muchas organizaciones fracasan no por haber elegido el paradigma "equivocado", sino por haber subestimado el nivel de preparación operativa y organizacional requerido. Por ejemplo, implementar un Data Mesh sin equipos de dominio capaces de construir y mantener productos de datos puede derivar en fragmentación. De igual forma, aplicar un Data Fabric sin una estrategia de metadatos clara puede convertirse en un simple catálogo con poco impacto.

 
De la Estrategia a la Ejecución

En Nimble Gravity, trabajamos con organizaciones en distintas etapas de su madurez en datos. Lo que hemos comprobado es que la escalabilidad sostenible no se logra solo con tecnología. Se construye diseñando sistemas de forma intencional, alineados con la forma en que los equipos trabajan, crecen y toman decisiones.

Data Mesh y Data Fabric son marcos valiosos para replantear la gestión de datos empresariales. Pero no son el destino final: son estructuras de apoyo. Cualquiera sea el camino que elijas, empieza haciéndote las preguntas correctas:

  • ¿Dónde están nuestros cuellos de botella actuales?
  • ¿Qué tan maduras son nuestras prácticas de gobernanza y alfabetización en datos?
  • ¿Qué nivel de autonomía pueden asumir nuestros equipos de forma realista?
  • ¿Qué flexibilidad arquitectónica necesitaremos dentro de cinco años?

El objetivo no es solo infraestructura escalable. Es confianza escalable, innovación escalable y decisiones escalables. Y eso empieza al elegir un paradigma que se ajuste tanto a tu gente como a tus plataformas.

Cuando tu arquitectura de datos refleja cómo piensan, se mueven y deciden tus equipos, la escalabilidad deja de ser un desafío y se convierte en una consecuencia natural. Ayudamos a hacer realidad esa alineación mediante diseño pragmático, implementación técnica y estrategias centradas en las personas. Construyamos sistemas que evolucionen junto a tus equipos, no alrededor de ellos.